En un inesperado y conmovedor giro, Mariano Iúdica (42) confesó en Dale! la Tarde que hace 5 años cría en su hogar a "un hijo del corazón". La revelación salió a la luz cuando en el programa se trataba la información del proceso de adopción de Marcelo Pollino, y Marcela Coronel le pidió al conductor que cuente su propia historia de vida.
Muy nervioso y emocionado, Mariano expresó: "Tengo un hijo del corazón, que es un hijo mío más. Se llama Osvaldo, tiene 15 años, vive conmigo hace seis y es el hijo de Mirta (N de la R: según pudo averiguar Ciudad.com, es la empleada doméstica que trabaja en su casa). Vino a casa los 9. Para Salvador (su hijo menor) es su hermano, para sus hermanas es su hermano. Para mí es un hijo y yo... no quiero, nunca hablé de esto".
"Tengo un hijo del corazón, que es un hijo mío más. Se llama Osvaldo, tiene 15, vive conmigo hace 6 y es el hijo de Mirta (la empleada doméstica que trabaja en su casa). Vino a casa los 9. A veces me dice papá. Para mis otros hijos es un hermano más".
Explicando a pesar de su incomodidad, Iúdica aseguró: "El a veces me dice papá, a veces Mariano. Mis hijas más grandes, de mi primer matrimonio, también lo tratan como su hermano, lo llevan, lo atienden. Yo sé que a él le va a gustar, obviamente. Nunca lo conté porque... Lo trato como si fuera mi hijo. Lo reto, lo llevo a bailar, le firmo los boletines, voy a las reuniones de padres, me siento a solas. Tiene 15 años, está entrando a la adolescencia, hablamos de todos los temas que tengo que hablar con un chico de 15 años. Tengo una hija de 18 (Valentina); otra de 16, Bernarda (ambas de su primer matrimonio); a él de 15 (Osvaldo); y a Salvador, de 6 (fruto de su relación con la bailarina Romina Propato). Son mis cuatro hijos".
"Osvaldo es mi hijo, yo lo siento mi hijo en mi casa. Y Romina (Propato, su esposa) lo trata como un hijo más, un integrante más en la familia: en el auto, el restaurante, en Navidad, en la mesa grande cuando estamos todos los Iúdica juntos. Es un hijo más y lo vivo con mucha naturalidad, es un chico muy amoroso", cerró Mariano Iúdica con lágrimas en los ojos.
Un auténtico papá genial.
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